sábado, 12 de noviembre de 2016

#Innovar y #emprender: ¡No todo lo que brilla es oro!

el 4% de las innovaciones en Latinoamérica funciona aunque sin una metodología real, el restante de los empresarios (96%!!!!) prefieren copiar

Cuando se habla de innovación y emprendimiento se requieren datos concretos, alejados de toda "novelería", para proponer estrategias y políticas de real utilidad a un negocio o a a un país. Este post presenta algunos de estos "fríos" pero útiles datos. 

La idea de este post surge de recordar un artículo de hace un par de años, en Chile, que decía que menos del 25% de los emprendimientos realmente lo son. Suena asombroso, pero al buscar algunos más recientes, las cosas no cambiaron mucho.

De acuerdo a Martin Cabiedes fundador de Cabiedes & Partners y colaborador del IESE, citado en el periódico Expansión de España en Octubre del 2016 señalaba que el 90% de las innovaciones no son ideas originales, sino adaptadas

Hay un 10% son innovaciones aparentemente reales, pero no se sabe si serán negocios rentables, viables y sostenibles luego de 5 años



Esto evidencia que las personas mayormente optan por un tipo de innovación llamado incremental, en el que se hace énfasis de la adaptación de innovaciones ya existentes en otras partes. 

Y si nos vamos a la región Latinoamericana con estos términos, los datos pueden ser aún más drásticos. 

Según Jurgen Klaric, especialista en neuromarketing y neuroinnovación asevera en una entrevista para el periódico chileno el Mercurio de Valparaíso en Noviembre del 2015 que el 4% de las innovaciones en Latinoamérica funciona aunque sin una metodología real, el restante de los empresarios (96%!!!!) prefieren copiar; es decir son adaptaciones, ideas deslocalizadas entre un país y otro, o procesos de creación de empresas basados en ideas existentes. 

Se podría decir que Latinoamérica es una región con alto nivel para emprender pero no así para el emprendimiento. 

Esta realidad puede deberse a un contexto en el que se pinta fácil innovar pero que al irse a la práctica puede ser más difícil de lo que se pensaba ya que se necesita el engranaje de muchas piezas. 

Se necesita un entorno disponible para ayudar a los emprendimientos, tanto de personal como de financiamiento y por supuesto un apoyo en las políticas de innovación del país; además de la pasión del emprendedor. 

En efecto, París de l’Etraz, director del Venture Lab de IE Business School, indicó para el periódico Expansión de España, recientemente, en Octubre del 2016 lo siguiente: "Se ha transmitido que con una buena idea e ilusión se puede ser Mark Zuckerberg, y no es así"



El paso de Facebook como innovación tecnológica y de negocio, hacia una empresa emprendida como negocio sostenible, fue posible porque hubo tradicionales negociaciones financieras y legales; aunque no se puede negar que también se requirió mucha pasión para la negociación por parte del emprendedor. 

Es más, la observación empírica de varios casos al respecto, indican que muchos llamados emprendimientos son procesos de creación de empresas. 

Estos datos no son nuevos y eso lo sabemos muy bien quienes llevamos un tiempo estudiando el tema de la innovación, en mi caso desde el 2001 al obtener mí doctorado en Proyectos de Innovación en España; aunque de una manera más informal ya vengo trabajando con estos temas profesionalmente desde 1992. 

Ojo, esto no quiere decir que quien no emprenda o no innove esté mal o fuera de la realidad. Lo importante es crear empresas, negocios, emprendimientos o innovaciones que resuelvan problemas de las personas, o sociales. Eso es todo.


Michael Porter: ¿porqué las empresas pueden resolver problemas sociales? (16:28' traducido al castellano)


Quisiera cerrar este post con esta idea "Emprender e innovar está de moda pero debemos ser responsables en usar estos términos”, especialmente cuando se incentiva a una gran cantidad de la población mundial cuyas posibilidades de emprender e innovar son menores frente a quienes tienen acceso o poseen una base económica importante, y por supuesto un networking heredado.

Y con estos números, ¿qué están haciendo las miles de empresas de consultoría o los consultores en innovación y emprendimiento?

#innovar y #emprender: algo de mucho cuidado.

¿Ha comprendido lo sociedad realmente lo que significa innovar y emprender?
¿Ha comprendido lo sociedad realmente lo que significa innovar y emprender? 

Innovar y emprender son dos términos que se han puesto de moda, principalmente cuando se habla de desarrollo económico, desarrollo local o desarrollo empresarial. 

Los jóvenes ya consideran que debe ser parte de su cultura y que si no se nace emprendedor hay que comenzar a desarrollar las habilidades que les acerquen hacia ese fin. 

Considero que los términos emprendimiento y el acto de emprender requieren revisar la llamada disonancia etimológica, mientras que la palabra innovación requiere profundizarse aún más; y eso es lo que me propongo hacer con este post. 

Quisiera comenzar este párrafo con una pregunta ¿Es lo mismo emprendimiento que emprender?


Tendremos que comenzar diciendo que hay que tener mucho cuidado cuando nos referimos a estos términos, ya que definitivamente no es lo mismo. 


Formalmente hablando, el emprendimiento alude al máximo reto de poner en marcha un modelo de negocio no concebido antes

Mientras que emprender hace referencia al acto de iniciar alguna actividad

Es decir, normalmente se emprende una actividad, pero no por eso se hacen o consiguen  emprendimientos. 

 Y… ¿Cómo podemos interpretar innovación y el proceso de innovar? 

Con estos términos ocurre exactamente lo mismo que con emprendimiento y emprender. 

Mientras el primero, innovación alude a un resultado cuyo éxito depende de la superación de muchas etapas para ser considerado innovación incluyendo los frutos económicos reales

El segundo término, proceso de innovar, se refiere al conjunto de herramientas, metodologías, métodos que se utilizan para tratar de alcanzar la innovación, cuyo resultado puede o no ser una innovación pero si algo muy beneficioso para las personas y la sociedad que participan del proceso.

Por eso la importancia de dominar la etimología subycente y ofrecer un sistema de innovación, y un sistema de emprendimiento, integrados, ambos, a los procesos tradicionales de mantenimiento económico de la sociedad que han existido, existen y seguirán existiendo.

Hoy en día hay que salir de la zona de confort de los cómodos y "facilitistas" conceptos "emprender" e "innovar" que se usan.


Motivación: salir de la zona de confort (7:28')



Blog ganador Premio Novagob Excelencia 2017